Esta salsa se puede preparar de dos maneras, la auténtica es con un mortero, con ajos, aceite y sal y venga majar y añadir un hilillo de aceite hasta que esté lista.
Yo no me veo capaz, siempre que lo he probado se me ha cortado, por tanto os voy a contar la otra receta que no es tan auténtica pero siempre sale.
INGREDIENTES
- 2-3 dientes de ajo (depende lo fuerte que os guste)machacados
- Sal
- Un vaso de aceite de oliva virgen (si es muy ácido se cortará, es mejor usar uno de máximo 1 grado)
- 1 huevo muy fresco
Introducir todos los ingredientes en el vaso de la batidora, meter la batidora apagada hasta el fondo, encenderla a la máxima potencia y mantenerla en el fondo un minuto e ir subiendo poco a poco, sosteniendo el vaso con la otra mano, cuando lleguéis arriba de todo ya estará hecho.
- Se puede guardar tapado un par de días en la nevera, pero vigilar porque lleva huevo crudo, si no está bien refrigerado es mejor usarlo en el día y desechar el sobrante, sobre todo en verano.
- Sirve de acompañamiento a un montón de platos de carne, también a la fideuá, a las patatas, al bacalao, y a todo lo que nos apetezca si nos gusta el ajo.
- Para evitar que el ajo repita se le puede sacar el germen del centro.
- No lleva nada de gluten, por tanto se permite en las dietas sin gluten, no diría lo mismo del resto de dietas.